El gobierno de Biden cambia su posición sobre la operación de la FDI en Rafah después de que casi un millón de gazatíes fueran evacuados con éxito
El gobierno de Biden había expresado anteriormente su firme oposición a que Israel llevara a cabo una operación militar contra las fuerzas terroristas de Hamás en Rafah debido a la presencia de más de un millón de civiles gazatíes en la zona.
A principios de este mes, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, afirmaron que Israel no tenía «ningún plan creíble» relativo a la seguridad de la gran población civil concentrada en la ciudad del sur de Gaza.
Sin embargo, tras la rápida y exitosa evacuación por parte de Israel de casi un millón de gazatíes de Rafah, la Casa Blanca habría dado marcha atrás en su postura anterior, según informó el jueves el Wall Street Journal (WSJ).
«Nos estamos alejando de la capacidad de Israel para hacer la guerra en esas zonas», dijo el presidente estadounidense, Joe Biden.
Estados Unidos había calculado que Israel tardaría al menos dos meses en evacuar al millón de civiles de Rafah, sin embargo, el ejército israelí consiguió despejar la zona en sólo dos semanas.
Un funcionario estadounidense anónimo confirmó que Israel había ajustado su enfoque para satisfacer las expectativas de Estados Unidos.
«Es justo decir que los israelíes han actualizado sus planes. Han incorporado muchas de las preocupaciones que hemos expresado", dijo el funcionario al tiempo que indicaba que Israel podría ser capaz de reactivar las estancadas negociaciones indirectas con Hamás sobre los rehenes.
La Casa Blanca también indicó que está satisfecha con la estrategia de las FDI de llevar a cabo operaciones selectivas contra terroristas en diversos lugares de la zona de Rafah, en lugar de una incursión a gran escala. Hasta ahora, las fuerzas israelíes han eliminado a decenas de terroristas de Hamás en Rafah, con civiles fuera de peligro.
Hablando bajo condición de anonimato, un alto funcionario israelí reveló que la administración Biden suele ser lenta con su apoyo a diversas operaciones militares israelíes.
«Esta administración nunca apoya nada de lo que hacemos hasta que lo hacemos», dijo el funcionario israelí al WSJ.
Durante los últimos siete meses, las Fuerzas de Defensa de Israel han degradado la mayoría de los batallones de Hamás en Gaza. Sin embargo, el grupo terrorista aún mantiene cuatro batallones en Rafah, estratégicamente situada cerca de la frontera egipcia.
Los dirigentes israelíes, incluido el primer ministro Benjamín Netanyahu, han hecho hincapié en repetidas ocasiones en que Israel no puede permitir que Hamás siga controlando Gaza por la amenaza que supone para el país.
A principios de mayo, las fuerzas israelíes capturaron el paso fronterizo de Rafah entre Egipto y Gaza. El paso de Rafah se considera estratégicamente importante para que Hamás siga operando y lo utiliza, junto con sus túneles fronterizos, para introducir armas y otros bienes de contrabando en la Franja de Gaza.
Al controlar el paso fronterizo de Rafah, Israel está dificultando enormemente que Hamás se rearme y reponga su inventario militar.
Sin embargo, el control israelí del paso fronterizo de Rafah ha provocado una crisis diplomática con Egipto. Aunque El Cairo ha dirigido las negociaciones indirectas entre Hamás e Israel, al parecer se niega a coordinar las entregas de ayuda humanitaria con Israel en el paso fronterizo de Rafah, ya que se opone a la presencia de fuerzas israelíes en la zona.
All Israel News Staff es un equipo de periodistas de Israel.